Matt Meyer gana el puesto de gobernador en Delaware y empieza un nuevo ciclo en el territorio donde Kamala Harris ha sido más votada
La que es vicegobernadora, Bethany Hall-Long, se ha quedado en el camino por la lucha tras sus escándalos y el hartazgo de la ciudadanía
Delaware (Dover) se ha ‘ganado’ en los últimos años la imagen de un estado poco transparente y opaco, y con diferentes acusaciones, por ejemplo, hacia sus tribunales, de las cuales algunas ya hemos recogido en este digital. Quien iba a pronosticar esta situación cuando este territorio empezó a convertirse en un gigantesco enclave financiero. Es la sede de más de 1’6 millones de empresas de todo el mundo, pero soportar un peso así es difícil y los últimos problemas han aparecido con Elon Musk, que incluso denunció amiguismo, de por medio y también con el caso TransPerfect, con el que se destaparon connivencias entre las altas esferas políticas del Estado. Una especie de ‘puerta giratoria’.
¿Y cómo se cambia esta reputación? El giro de gestión de Delaware podría empezar a darse desde la primera línea política. Hasta ahora, su gobernador era el demócrata John C. Carney, de cuyo sueldo no aparece ningún dato en la página oficial del Estado, aunque el portal ‘Ballotpedia’ publica que su salario sería de 171.000 dólares anuales. Son unos 154.400 euros brutos. Lleva en el cargo desde 2017. Si comparamos, el salario mínimo en Delaware está fijado en 13,25 dólares por hora.
El futuro político del territorio se presentaba con la contienda para ocupar el puesto de gobernador. Tras la celebración de las primarias, los candidatos eran Matt Meyer, actual ejecutivo del condado de New Castle y por la otra parte, el veterano legislador Mike Ramone. Las propuestas que ambos han presentado son muy distintas, pero un factor que tienen en común es el hartazgo de la ciudadanía ante los escándalos de la clase política, por lo que deberán aportar un cambio. Aproximadamente, Delaware cuenta con poco más de un millón de habitantes. En estas elecciones, más de 275.500 personas han elegido a Meyer como nuevo gobernador, casi un 56% frente al 44% de Ramone. Recordemos que, en esta fecha, además de elegir a su gobernador, los ciudadanos de Delaware también votaban por el nuevo presidente de Estados Unidos: Kamala Harris ha ganado esta carrera en el territorio con un 56,5% de los votos. Se evidencia que los demócratas tienen más apoyo en este territorio, muy ‘cansado’ del ámbito político. Sin embargo, Donald Trump volverá a la Casa Blanca tras barrer a la candidata demócrata. Lo hará por segunda vez en su historia, tras su victoria de 2016. Pero no habrá una tercera ocasión. La Constitución del país no lo permite.
El hecho de que el pueblo quiere cambiar la esfera política se ha escenificado en el revés electoral que ha sufrido la que se postulaba como la demócrata favorita, Bethany Hall-Long. Y es que su nombre es conocido para los vecinos de Delaware, pues ya actúa como vicegobernadora, también desde el año 2017, hace siete años. Tampoco hay un dato oficial sobre su retribución en este puesto y es el portal anteriormente mencionado, ‘Ballotpedia’, quien publica un sueldo de 83.884 dólares anuales (75.808 euros).
La plataforma ‘Citizens for a New Delaware Way (CNDW) PAC’ se pronunció anteriormente sobre la candidatura de Meyer, de la que dijo que “la gente de Delaware ha hablado en las urnas, y han votado para reformar el antiguo "Delaware Way" de acuerdos de trastienda que favorecen a un cuadro de élites ricas, y marcan el día una nueva era de buen gobierno que valora la igualdad, la responsabilidad y la transparencia”.
¿Cómo es el gobierno actual?
Cabe destacar que, en 2024, el gobierno de Delaware ha fijado un gasto total de 8,98 mil millones de dólares en fondos generales, federales y especiales y un total de 845.186 transacciones, según su propia página web. Además, los salarios de los empleados se colocan en el tercer puesto del ranking de la categoría de gastos principales con 545,9 millones de dólares. Carney cuenta con un gabinete de personal formado por hasta 32 puestos, en los que se incluyen el jefe de este, directores de diferentes áreas y también asesores, entre otros cargos. Por otra parte, el equipo de Gobierno está formado por hasta 17 políticos.
Este nuevo rumbo, como se prevé, se ha visto precipitado por las campañas publicitarias que han ido apareciendo en los últimos meses contra el estatus del sistema judicial de Delaware como la que impulsó el CEO de TransPerfect, Philip Shawe, que ya contamos en este digital. Precisamente, el Tribunal o Corte de Cancillería del territorio es uno de los instrumentos que favorecieron el crecimiento del Estado como enclave financiero. Es un sistema legal especializado que maneja casos relacionados con la ley corporativa y que, además, es único en Estados Unidos, pero ahora las sombras se están apoderando de su gestión.
Esta publicidad ha denunciado abiertamente los vínculos entre jueces y figuras políticas y, de ellos, se desprende la urgente necesidad de reformar un sistema que muchos consideran corrupto. Ha sido una herramienta para concienciar a los votantes y también para movilizar a los ciudadanos en aras de un cambio. De esta forma, estas elecciones marcan un punto de inflexión en el rumbo que tomará Delaware. ¿Mejorará en transparencia?