El mundo de la política casi siempre está rodeado de crispación y de discusiones y así estamos acostumbrados a ver a nuestros electos debatir y, especialmente, no ponerse de acuerdo en la mayoría de los temas. Pero, parece, que en los asuntos económicos que les toca de cerca, sí es posible llegar a un pacto. El más reciente ejemplo es el que ha ocurrido en las Cortes Valencianas, donde, por unanimidad en la Comisión de Gobierno Interior, los distintos portavoces parlamentarios han aprobado que los diputados puedan recibir una prestación cuando cesen en el cargo. 

No es algo inusual, pues en otras instituciones políticas, como los parlamentos autonómicos, es común verlo. Realmente, es similar a la prestación por desempleo que puede cobrar cualquier persona de a pie al dejar de trabajar. En el caso valenciano, se han fijado unos requisitos para poder recibir esta: haber estado un mínimo de 18 meses en el escaño, no ser funcionarios públicos, no trabajar por cuenta ajena o propia, y no tener la edad de jubilación. 

Hemiciclo de las Cortes Valencianas.

Los diputados que cesen en el cargo y soliciten esta prestación la percibirán durante un máximo de 24 meses, de una forma equivalente a la asignación reglamentaria. Esta asciende, actualmente, a 2.511 euros brutos mensuales, unos 35.158 euros por anualidad, según el documento de retribuciones publicado en el Portal de Transparencia de Les Corts. La paga extraordinaria por diputado es de 5.022 euros. A los sueldos de los diputados en activo se les suma otros complementos por cargo, por dedicación exclusiva e incluso la indemnización por kilometraje, pero, en principio, estos ‘pluses’ no estarán integrados en esta prestación y solo será la asignación base. 

Es decir, no cobrarán el salario al que acceden actualmente estando ‘en activo’. Por ejemplo, la presidenta de Les Corts, Llanos Massó, ingresa la asignación, además de un complemento de la Mesa de 4.186 euros y otro por dedicación exclusiva de 388 euros al mes. También recibe 227 euros por la ‘indemnización ejercicio de la función’ como miembro de la Mesa de Les Corts. Así, percibe 7.312 euros cada mes. En el caso de los síndicos (portavoces) de los cuatros grupos parlamentarios que han aprobado esta prestación, cobran la asignación, el complemento por su cargo que es de 2.180 euros, y el de dedicación exclusiva ya mencionado, a expensas del kilometraje que le corresponde a uno (distancia desde su vivienda a las Cortes.

Cualquier diputado que cese y sea ‘apto’ para recibir esta indemnización, puede llegar a ingresar 60.264 euros en total, por un máximo de 24 meses, si lo ha sido por un periodo de 69 meses, tal y como ha adelantado Valencia Plaza. La Cámara valenciana está constituida en la actualidad por 99 diputados. 

Similar a las Cortes Generales 

En el Congreso de los Diputados también se aplica esta indemnización por cese en unos términos similares. La cuantía de la prestación es el equivalente de una mensualidad de la asignación constitucional por cada año de mandato parlamentario en las Cortes Generales o fracción superior a seis meses, y hasta un límite máximo de veinticuatro mensualidades. En la actualidad, el importe de la asignación es de 3.142 euros. Los exparlamentarios José Ignacio Echaniz y Zaida Cantera son los únicos que ingresan ahora esta cantidad, según publicó la propia Cámara Baja en el mes de septiembre. Y lo mismo sucede en el caso del Senado, aunque aquí la asignación actual es de 3.284 euros. Eso sí, no hay que confundir la indemnización por cese con el listado de diputados 'pensionistas' que perciben decenas de señorías, según el tiempo que han sido parlamentarios. Los hay que cobran 37 euros al mes y hay otros que ingresan casi 3.000 euros.

En el caso de Cataluña, que suele contar con los sueldos públicos más elevados, en el Parlament se fijan unos criterios individualizados y se tienen en cuenta con el número de legislaturas que el diputado ha estado en activo, así como la asignación mensual en función de los cargos, por lo que la cantidad será diferente para cada uno. Se distribuye mensualmente por un importe máximo, igual a la suma de la asignación individual, el complemento de cargo y el complemento DT 2.ª RPC que percibió el diputado el mes inmediatamente anterior a la disolución de la legislatura. Por otra parte, los expresidentes sí tienen una pensión vitalicia fijada en 5.714 euros mensuales, tal y como informa la Cámara autonómica. Hace unos días, publicamos en este digital las pensiones que recibieron en 2023 los exmandatarios del Parlament.