Una gran parte de los representantes de los ciudadanos de nuestro país compatibilizan sus tareas de servicio público con otras del ámbito privado, siempre que no haya un conflicto de intereses. No obstante, existe la posibilidad de que se ejerza un trabajo remunerado que sea objeto de crítica en algún momento. Es el caso de Marta Medina, concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Toledo, una ciudad con unos 86.000 habitantes.

Su doble rol es el motivo de la polémica: además de edil, también es propietaria y encargada de Relaciones Públicas de la discoteca Sithon’s. Todo puede parecer normal, hasta que el establecimiento ha lanzado un anuncio para el Día de la Mujer, el 8 de marzo, con una “Fiesta especial Girl Power xtreme”. Un evento en el que las mujeres tienen la entrada gratis. Y algunos miembros de la oposición ya han puesto el grito en el cielo. Sin ir más lejos, para el grupo de Izquierda Unida-Podemos es “un despropósito”.

Por el momento, Medina ni su formación se han pronunciado, aunque el señalado cartel que anuncia la fiesta no aparece en las redes sociales de la discoteca. Con la situación así, en el consistorio gobernado por el Partido Popular y Vox, todo seguirá igual.

La socialista forma parte de los 11 ediles de su partido en la oposición, que tiene dos de ellos con dedicación exclusiva y otro al 50%, como se acordó en pleno. Sin embargo, solo conocemos el número de concejales liberados, pero no sus nombres, ya que está información no está publicada en el Portal de Transparencia del Ayuntamiento que este digital ha consultado. En todo caso, sí se han dado a conocer las cifras: el sueldo público de los ediles con dedicación está fijado en 51.393 euros brutos anuales, que vienen a ser 3.670 euros al mes. Los que no la tienen cobran 321 euros de dietas por asistencia al pleno, 12 al año, y 63 euros por asistir a comisiones. El alcalde, el ‘popular’ Carlos Velázquez cuenta con una remuneración de casi 70.000 euros (69.957 euros). Son 4.996 euros mensuales. Si comparamos, el alcalde de Albacete gana cerca de 67.000 euros anuales, menos que Velázquez, pero la capital manchega tiene más del doble de vecinos censados, unos 173.000.

Otro reparto económico importante en la política es el de las asignaciones a los partidos. En el caso del consistorio de Toledo, cada grupo cuenta con una retribución fija de 7.200 euros al año y 525 euros al mes por cada concejal que tengan. De esta forma, el PSOE es el que más ha cobrado con una cantidad de 76.500 euros para sus arcas municipales.

Es exconcejala de Gobierno

Marta Medina Quiroga ha ejercido como personal estatutario del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM). De esta manera ha formado parte de la Administración pública. También ha sido delegada sindical de UGT para el SESCAM entre 2017 y 2019, así como Relaciones Públicas en el sector del ocio, como hemos mencionado.

En el pasado mandato, de 2019 a 2023, fue concejal de Parques y Jardines y Cementerios del Ayuntamiento de Toledo. Al inicio de este se fijó un sueldo de 46.953 euros para un edil de Gobierno con dedicación exclusiva como ella. De hecho, en ese año, ella misma pidió poder compatibilizar su trabajo en el consistorio con el que desempeñaba en la discoteca, aunque el pleno dejó el asunto apartado. En 2022, según su última declaración de bienes y rentas obtuvo unos ingresos de 53.462 euros. Ese mandato estuvo bajo la alcaldía de Milagros Tolón, que tenía un salario de 63.913 euros.

Casos sexistas y la política

Además del concejal de IU-Podemos, Txema Fernández, que ha calificado como “la excusa perfecta para tener claro que Toledo necesita un III Plan de Igualdad de forma inmediata, que no esté copiado de ningún otro municipio de Castilla-La Mancha”, también se ha pronunciado la ONG para el Desarrollo de la comunidad autónoma. Así, han expresado su rechazo “ante la discriminación de género perpetrada por esta conocida discoteca del Casco Histórico de Toledo”.

Cabe destacar que esta no es la primera vez que la discoteca toledana escandaliza con sus mensajes. El 7 de abril de 2022 el local promocionó un concurso de “pollofres”, es decir, dulces con formas fálicas, que también fue criticado por las formaciones políticas. En aquel momento Medina era concejal del equipo de Gobierno.

La entrada gratis a las mujeres en las discotecas es una situación más habitual de la que pensamos, y cada vez más se considera una práctica sexista. Por ejemplo, en 2022, la Guardia Urbana de Figueres (Girona) sancionó a un local nocturno por esta razón, para “poner fin a la cosificación de las chicas”, como dijo su alcaldesa, Agnés Lladó. También trabajó en esto el Gobierno Vasco al intentar prohibir estas diferencias en el precio en 2017 con un reglamento.

Por desgracia, se han dado muchas ocasiones en las que la política se mezcla con frases o términos sexistas, algunos incluso de la boca de cargos de este ámbito. En este digital hemos comentado algunas, como la que profirió la diputada de Vox, Carla Toscano, hacia Irene Montero, afirmando que su único mérito era “haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias". Otros casos como el de Josep Lluís Salvadó, ex alto cargo del Gobierno, en una conversación en la que hablaba sobre la posibilidad de elegir como consellera de Educación “a la que tenga las tetas más gordas”.