El Ejecutivo aún sigue configurándose en todos sus departamentos, especialmente en los que están encabezados ahora por un nuevo ministro. Un baile de nombres y recolocaciones como el que hemos vivido en las últimas fechas. De eso también se ha encargado Mónica García, la ministra de Sanidad que llegó desde la Asamblea de Madrid de la mano de Sumar y sus cinco carteras ministeriales.

Este miércoles el Boletín Oficial del Estado (BOE) ha recogido dos nombramientos de esta área tras ser aprobado en el Consejo de Ministros. Pedro Gullón es el nuevo director general de Salud Pública en sustitución de Pilar Aparicio, que ha cesado. Y, además, se ha confirmado la aparición de un nuevo organismo: un Comisionado de Salud Mental dirigido por Belén González Callado. Un asunto que ya se avanzó a finales de noviembre por parte del socio minoritario del Gobierno.

Belén González Callado.

Esto también implica un nuevo sueldo público del que no hay referencias exactas en el Portal de la Transparencia de la Administración General del Estado. Su rango es de subsecretaria de Estado, tal y como se especifica en el organigrama del propio Ministerio. Según los Presupuestos Generales del Estado de 2023, que están prorrogados desde el 1 de enero, tiene fijado un sueldo base de 15.164 euros brutos anuales; un complemento de destino de 19.841 euros; y un complemento específico de 34.054 euros. En total, 69.059 euros. Además, tiene derecho a dos pagas extraordinarias, en junio y diciembre, de 2.470 euros cada una. Con estas cifras, en un año completo puede cobrar cerca de 74.000 euros. Este 2024 ingresará por 11 meses y 20 días. 

No obstante, no es todo, ya que también ingresa el complemento de productividad, que otorga y decide el mismo titular del Ministerio, quien le ha nombrado. Habitualmente, este plus suele disparar los sueldos hasta los 100.000 euros o más. Por ejemplo, en 2022, Pedro Sánchez le otorgó 41.000 euros por este complemento a Ernesto José Gasco, en ese momento alto comisionado para la Lucha contra la Pobreza Infantil y con rango de subsecretario de Estado. Podrá cobrar más que la ministra que lo nombró ya que García no percibe pagas extrordinarias ni plus de productividad. Actualmente ingresa unos 6.617 euros mensuales. Los criterios por los que se decide cada cifra no son públicos, por eso Sueldos Públicos lo pidió en su carta a los Reyes Magos. 

El nuevo Comisionado abordará los aspectos sociales de la población y así, coordinará medidas que mejoren la salud mental. La ministra de Sanidad comentó hace unos meses que “la salud mental no solamente depende de tener profesionales, depende de tener una vivienda, depende de tener un buen sueldo, depende de tener buenas condiciones laborales...”. Según fuentes del Ministerio consultadas por este digital, el Comisionado “todavía no ha empezado a funcionar” aunque “pronto tendremos más información”. En el momento de redactar este artículo, se desconoce la plantilla del Comisionado, el presupuesto, las competencias o si se contratarán asesores, entre otros asuntos.

Una nueva subsecretaria de Estado

Belén González Callado es licenciada en Medicina, con especialidad en Psiquiatría. Cuenta con un máster en Estudios Feministas y un máster en Gestión Clínica y Dirección Médica y Asistencial. En su trayectoria profesional se ha desarrollado en el ámbito de la atención clínica en Psiquiatría, trabajando en distintos dispositivos de la red asistencial a la salud mental de la Comunidad de Madrid como Centro de Salud Mental, Unidad de Cuidados Psiquiátricos Prolongados y Programa Comunitario Intensivo y Pisos Supervisados.

Además, González Callado cuenta con experiencia en actividad asociativa relacionada con la salud mental como miembro de la Junta de la Asociación Madrileña de Salud Mental (AEN-Profesionales de Salud Mental) desde 2017, siendo presidenta de la misma desde 2023. También ha sido miembro del Comité de Personas Expertas en Precariedad Laboral y Salud Mental del Ministerio de Trabajo y Economía Social, y coautora del Informe PRESME resultado de dicha comisión. Desde 2022 ha colaborado como técnica externa con el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura del Defensor del Pueblo y en actividades relacionadas con salud mental en contextos de privación de libertad. Esta será la primera vez que cobre sueldos públicos en política.

Relevo en la dirección general

Gullón, por su rango de director general de Salud Pública, contará con un sueldo base de 15.237 euros; un complemento de destino de 16.047 euros; y uno específico de 27.763 euros. En total, 59.047 euros. También percibe las dos pagas extraordinarias de 2.209 euros cada una, así como el complemento de productividad que se le conceda.

Su predecesora, Aparicio, ha estado en el cargo desde julio de 2018, año en el que cobró 42.275 euros por cinco meses, incluidos ocho trienios. En 2019, cobró 88.235 euros y en 2020, 88.680 euros. Por su parte, en 2022 ingresó 92.683 euros con nueve trienios. La retribución de 2021 no está publicada y hay que esperar a Transparencia para conocer el dato de 2023.

Pedro Gullón Tosio es licenciado en Medicina y especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública. También tiene un máster universitario en Salud Pública y es doctor en Epidemiología y Salud Pública. Además, es especialista en Políticas Públicas y Derecho a la Ciudad.

Ha realizado sus principales tareas profesionales en el ámbito académico como profesor e investigador en instituciones de España, Estados Unidos y Australia. Su principal campo de investigación ha sido el análisis de cómo diferentes políticas, tanto sanitarias como de otros sectores como el urbanismo, afectan a la salud de la población y a la equidad en salud. Durante la pandemia, trabajó en la evaluación de intervenciones no farmacológicas, las desigualdades sociales del COVID-19 y los determinantes de la vacunación y la reticencia vacunal. Además, colaboró con servicios de salud pública como el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias y el Departamento de Salud de Navarra, en labores de asesoramiento y elaboración de informes. También es coautor del libro Epidemiocracia. Nadie está a salvo si no estamos todos a salvo.