Las elecciones del 28 de mayo siguen dejando nuevos alcaldes en los ayuntamientos de toda España. Y con ello, la fijación de nuevas retribuciones para el ejercicio de sus cargos. Muchos de ellos, las aumentan. Por esta razón, en Sueldos Públicos ya nos preguntamos el por qué los alcaldes se suben el sueldo cuando llegan al poder. Es difícil encontrar una respuesta. El propio presidente del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, planteó en enero, cuando presentó un Plan de Calidad Institucional con 60 medidas, una tabla de sueldos públicos de los altos cargos según el nivel de responsabilidad para la Administración General del Estado. Así, en el caso del Gobierno central se elaborará una tabla en la que se establecerán los distintos rangos de retribuciones con el fin de adaptarlos a su nivel de responsabilidad, y se promoverán acuerdos en este mismo sentido en el resto de las administraciones. En todo caso, y con independencia de las modificaciones resultantes tras el necesario análisis de esta cuestión, el nuevo baremo se aplicará en la legislatura siguiente a su aprobación en el Congreso de los Diputados.

Ilustriación de la página web del Ayuntamiento de Jalance.

De nuevo, la polémica está servida con este asunto. En Jalance, un pueblo del interior de la provincia de Valencia de apenas 788 habitantes, su nuevo alcalde cobrará un 1.200% más que el anterior. Se trata de José Carlos Poveda, del PP, que ganó con mayoría absoluta en el municipio. Ahora, con una dedicación parcial del 75% tendrá un salario de 34.848 euros brutos anuales. Incluso la oposición ha denunciado que con los gastos de la Seguridad Social esta cifra podría ascender a 43.742 euros. Su justificación es que no lo puede compatibilizar con su actual empleo. El caso es más llamativo si cabe, y se han hecho eco varios medios nacionales, puesto que su antecesor en el cargo, Manuel Gómez, no percibió un sueldo del erario, solo la asistencia por plenos.

No es el único caso que se da en localidades de menos de 1.000 habitantes ni hay que irse muy lejos de la provincia de Valencia. En Cortes de Pallás, su alcalde David Gras tiene una retribución fijada en 32.555 euros, dividida en 14 pagas y con también un régimen de dedicación del 75%. La población es de 733 habitantes. Los salarios del resto de la corporación son similares; 30.385 euros. En este caso, el sueldo es similar al de la localidad de Énova que supera los 900 habitantes; 32.080 euros.

Menor población tiene Alpuente con 670 vecinos. La alcaldesa ‘popular’ Itziar Méndez tiene un régimen de dedicación parcial y un sueldo de 31.839 euros. Según los datos que ofrece el ISPA del Ministerio de Hacienda y Función Pública. Sin embargo, en Fuenterrobles, con 20 habitantes más, los miembros de la corporación no tienen una retribución fijada por su cargo, sino que solo ingresan del erario por la asistencia a sesiones de órganos colegiados; 12 euros por la sesión ordinaria que tiene periodicidad trimestral y 12 también por sesión extraordinaria. Llama la atención la diferencia entre una localidad u otra en su sistema de retribuciones.

Las situaciones son similares en algunas localidades de en torno los 700 habitantes y en las que su máxima autoridad tiene un régimen de dedicación parcial por su cargo. En Caudete de las Fuentes, su alcaldesa Vanesa López tiene un salario de 15.435 euros al año. Similar a Chulilla, donde Vicente G. Polo cobra 14.910. Mientras que en Emperador, el salario está fijado en 12.000 euros. Por su parte, el primer regidor del municipio de Benimuslem ingresa 10.483 euros.

Es probable que en estas pequeñas poblaciones muchos de sus alcaldes no tengan un régimen de dedicación por el ejercicio de sus funciones. En estos casos, los ingresos son mucho menores o inexistentes. En Fontanares, de 953 de población, su alcalde Julio Bosca, dedica 15 horas a la semana al cargo (37’5%) con un salario de 700 euros brutos al mes, según el Portal de Transparencia municipal. Francisco Gómez en Domeño, de 656 habitantes, no tiene dedicación, pero sí ingresa 1.100 euros anuales. Lo mismo en Torres Torres, con 703 vecinos de población, en el que María Amparo Bolós percibe 670 euros o en Novelé de 861 habitantes cobra 860 euros. Pudiendo ser en concepto de dietas o asistencias. En el caso de Benavites con 667 habitantes y Jarafuel con 777 no perciben ninguna retribución. Todos son municipios de la provincia de Valencia.

¿Se tiene en cuenta el número de habitantes?

Hemos hablado de localidades que no superaban los 1.000 vecinos de población. Pero es llamativo que algunos de los sueldos expuestos son similares o incluso superiores a municipios que ya llegan a los 2.000 habitantes o más. Por ejemplo, sueldos que superan por poco o rondan los 30.000 euros los encontramos en poblaciones como l’Alcúdia de Crespins que tiene 5.200 habitantes o Sedaví que ya supera los 10.000. Todavía es más llamativo si se compara con Aldaia, con alrededor de 32.600 habitantes. Su alcalde, Guillermo Luján, con dedicación parcial, tiene un sueldo de 36.783 euros. 

Situaciones así ya hemos contado en este digital, como aquel alcalde de Moralzarzal (12.000 habitantes entonces) en la Comunidad de Madrid, que en 2014 cobraba casi como un ministro. Los disparates no cesan.