La entidad pública empresarial local (EPEL), que se responsabiliza del abastecimiento de agua en la ciudad de Valladolid y en las poblaciones del Alfoz, se llama Aquavall, antes Aguas de Valladolid. La compañía está inmersa en un proceso de remunicipalización, aunque desde el 1 de julio la gestión del agua en la capital castellana ya es pública. Es decir, era de gestión privada y el equipo de Gobierno que entró en 2015 se puso como objetivo que volviera a ser de todos los vecinos.

Pero no es tan sencillo y hay incertidumbre entre los cerca de 150 empleados porque, más temprano que tarde, tendrán que consolidar su puesto de trabajo mediante un concurso de méritos y capacidad. Además, la plantilla sabe que tiene que trabajar 2,5 horas más a la semana por imperativo legal, por el mismo sueldo, y han pasado a ser indefinidos “no fijos”. Estos datos los explicó la concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Valladolid, María Sánchez, en noviembre de 2016, tras una reunión con los representantes del Comité de Empresa. La concejal cobrará este año 70.174 euros en calidad de ‘concejal delegada general’, según la tabla retributiva del Portal de Transparencia de la página web del consistorio.

Por ahora, lo más transparente que hemos encontrado en este asunto es el sueldo del gerente. Pedro Luis Arroyo asumió el cargo en julio y fue presentado por el Consejo de Administración de la entidad, presidido por Sánchez. La elección de Arroyo viene tras un proceso de selección en que el participaron hasta 17 candidatos.

El elegido, dada su máxima puntuación en el concurso, declaró que era “un gran honor” hacerse cargo de Aquavall y prometió dedicar su “máximo esfuerzo”. Nació en Valladolid y es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos por la Universidad de Cantabria, donde se especializó en hidráulica, oceanografía y Medio Ambiente. Posee formación en Administración de Empresas y en los últimos 20 años se experiencia laboral se ha enmarcado en la firma Ingeniería Castilla del Grupo INCOSA. Ahí fue director técnico del Área de Infraestructuras y gerente del Área de Obras Hidráulicas, según datos de El Norte de Castilla.

¿Qué se exige a un gerente para dirigir una empresa pública?

Un documento en pdf de cinco páginas que remite al Boletín Oficial de la Provincia de Valladolid de 6 de marzo de 2017 lo explica todo. No es otra cosa que la convocatoria y bases para la provisión del puesto de gerente de la entidad pública empresarial local (EPEL) “Agua de Valladolid”.

La relación laboral de carácter especial es de personal de alta dirección, que está regulada por una norma de 1985 y por una Disposición Adicional de la Ley de Medidas Urgentes para la reforma del mercado laboral de 2012.

Las condiciones del puesto de trabajo indican una retribución básica de 60.000 euros y un complemento de puesto de 10.000 euros. En total, 70.000 euros brutos al año por una jornada laboral de 40 horas semanales, una dedicación exclusiva y la obligación de residir en la ciudad de Valladolid. Si divides, son 14 pagas de 5.000 euros al mes. Recuerda que el presidente del Gobierno de España, percibe, este año, unos 79.700 euros en 12 pagas y los ministros, 70.300.

El gerente se encargará de la gestión y dirección de la empresa, ejecutar y hacer cumplir los acuerdos del consejo, inspeccionar los servicios y responsabilizarse de los mismos. Podrá adjudicar contratos hasta el límite de 12.000 euros. Ordena los pagos y puede abrir y cancelar cuentas bancarias, entre otras muchas funciones.

Par optar a este puesto se necesita poseer un título universitario y demostrar una experiencia de, al menos, cinco años en funciones directivas de una entidad púbica o privada con un mínimo de 75 trabajadores. Uno de esos cinco años debe haber trabajado en una compañía relacionada con los sectores del ciclo urbano del agua y/o infraestructuras hidráulicas.

¿Y qué ha pasado hace unos días? Parece ser que la remunicipalización venía con millones debajo del brazo, pero según el Grupo Municipal Popular en el consistorio vallisoletano, Aquavall invertirá "un 40 por ciento menos" de los cinco millones que, estaban "previstos" para la segunda mitad de 2017. Según un comunicado del PP que recoge Europa Press, los “populares” han criticado lo que consideran una reducción de la inversión en un 40% respecto de la prevista inicialmente, pues dan por hecho que no se invertirán cerca de 2,2 millones de euros y "siempre que se cumplan las nuevas previsiones de la sociedad que, desafortunadamente, puede que no lo consigan".

El PP considera, por ello, que las cifras previstas de inversión para el año 2018 son "una carta a los reyes magos, sin fundamento y no diciendo la verdad", pues entienden que "si no son capaces de ejecutar cinco millones en 2017, difícilmente podrán ejecutar 11 millones en 2018". Cabe recordar que, cuando se comenzó a prestar el servicio público del agua por parte de Aquavall, el alcalde, Óscar Puente, del PSOE, que percibe un sueldo público de 76.500 euros brutos este año, explicó que se invertirían, anualmente, 15 millones de euros. Por lo tanto, en el presente semestre, serían 7,5 millones.