Por tercer año consecutivo se vuelve a congelar el sueldo de los funcionarios que trabajan en el Congreso y en el Senado. La caída desde 2010 es del 15,59 por ciento. 

Las Mesas de las Cámaras Alta y Baja se han reunido este lunes en las dependencias del Congreso para dar luz verde al presupuesto de los gastos compartidos para el próximo año y, como en años anteriores, también estará marcado por la austeridad. Cada una de las instituciones aprobará este miércoles sus respectivos presupuestos individuales.

En concreto, las cuentas de las Cortes Generales contemplan una partida de 50,9 millones de euros para pagar los salarios de los funcionarios que trabajan en una u otra Cámara, una cantidad que se reduce un 1,09 por ciento con respecto al presente año.

Se trata del tercer año consecutivo de congelación salarial, a los que se añade el recorte aprobado en mayo de 2010 por el entonces Gobierno socialista para todos los funcionarios. Al cabo de estos cuatro años, la partida para pagar las nóminas de los funcionarios acumula ya una disminución del 15,59 por ciento.

Menos para el Defensor del Pueblo

Pero, además, el presupuesto compartido por Congreso y Senado también incluye el dinero que se destinará a las instituciones que dependen económicamente del Parlamento, como son el Defensor del Pueblo y la Junta Electoral Central.

Así, los órganos de gobierno de ambas cámaras destinarán 14,02 millones de euros para el departamento que dirige desde el pasado mes de julio Soledad Becerril, una cifra que supone un descenso del 3,25 por ciento con respecto a 2012.

De su lado, la JEC contará con 441.088 euros para 2013, un presupuesto que se reduce en 13,65 por ciento con respecto al presente año, puesto que el próximo año no está prevista inicialmente ninguna cita electoral.