El 77 por ciento de los jóvenes potenciales beneficiarios del plan Prepara que viven con sus padres no podrá acceder a la ayuda de 400 euros para parados al tenerse ahora en cuenta la renta familiar de los ascendientes, que no puede superar el 75 por ciento del salario mínimo interprofesional (SMI) que está fijado en 641,40 euros mensuales.

Según datos facilitados por el sindicato Comisiones Obreras basados en la Encuesta de Condiciones de Vida de 2010, los parados que conviven con sus padres son el grupo más numeroso del total de potenciales beneficiarios no sometidos hasta ahora a la prueba de renta familiar.

A partir de la explotación de los datos, el sindicato estima que el 76,7 por ciento de los parados que viven con sus padres tiene una renta familiar que supera el 75% del SMI.

En concreto, CC.OO. explica que casi medio millón de parados convive con sus padres cobrando la prestación por desempleo, mientras que cerca de millón vive con ellos pero sin cobrar ninguna prestación.

De los más de 1,4 millones de desempleados en convivencia con sus padres, 350.000 de los que cobran prestación y 532.000 de los que no la cobran presentan una renta media familiar superior al 75 por ciento del SMI.