El Gobierno de España va a aceptar un préstamo para ayudar al sistema bancario español de hasta 100.000 millones de euros del Fondo de Estabilidad Presupuestaria en 'condiciones muy favorables', según el Ministro de Economía y Competitividad Luis De Guindos. El llamado rescate no es comparable al de Grecia y Portugal pero sí al de Irlanda. España no pide dinero pero acepta un préstamo, según el Gobierno. El ministro no ha dado cifras en la rueda de prensa tras la reunión del Eurogrupo y habla de "necesidades de capital manejables".

De Guindos ha destacado el papel fundamental del presidente, Mariano Rajoy, a la hora de entablar contactos con sus socios europeos y ha recordado que los problemas de la banca no se generan en cinco meses. Además, ha insistido en que el 70% de la banca española es "solvente" y la ayuda se destina a ese 30% de entidades bancarias que está en dificultades.

El rescate no es macroeconómico, ha recalcado. Esto deja la duda de si se tomarán deciones como la subida del IVA, la congelación de las plazas de funcionarios, el recorte en pensiones o en las prestaciones por desempleo, como ha ocurrido en Grecia. "Las condiciones se van a imponer a los bancos, no a la sociedad", ha matizado el ministro.

El mecanismo de ayuda al sector financiero español acordado por el Eurogrupo es "extremadamente positivo para la economía española y para el futuro del euro". De Guindos ha asegurado que el acuerdo supone "noticias muy positivas" desde el punto de vista financiero y permitirá "disipar todas las dudas" sobre la economía española.

Fuente de la fotografía.