La empresa Dysama (Distribuciones Sánchez Máñez), especializada en cerámica, baños y cocinas, cerró el pasado ejercicio con una facturación de 4,1 millones de euros y prevé superar los cinco millones en 2023. Recientemente, Azulejos Sánchez Chiva S.L., nombre fiscal de la firma, ha celebrado su 30º aniversario con una fiesta en las instalaciones de una de sus tiendas en la Avenida Pérez Galdós de Valencia.

El CEO de la empresa, Santiago Máñez, afirma que “el negocio nació en Chiva en 1992 de la mano de mis padres y cumplimos tres décadas de trayectoria el año pasado, pero por motivos de la pandemia, decidimos aplazar la celebración hasta el final de las restricciones sanitarias”. Máñez explica que “estamos en el sector de la venta y distribución de materiales para obras y reformas. Englobamos un concepto completo entre los que destacamos pavimentos y revestimientos cerámicos, baños con su equipamiento y cocinas en rangos generales. Aportamos soluciones constructivas a profesionales del sector de la decoración y soluciones técnicas”.

Asistentes al aniversario de Dysama.

Las tiendas de Dysama están localizadas en puntos estratégicos para la venta, lugares de paso en principales avenidas de municipios, travesías y también frente a supermercados de gran afluencia, buscamos el paso de la gente. Por su parte, el centro logístico y almacén central está en Chiva, junto con la exposición original, desde donde salen los camiones cada día con una ruta de reparto. “Cada tienda tiene un radio de actuación definido por número de habitantes que lo contabilizamos por población. Actualmente contamos con tres tiendas: Chiva, Pobla de Vallbona y la mencionada de Valencia. Al margen del canal punto de venta, trabajamos el canal prescripción de gran obra, donde damos soporte a promociones inmobiliarias con nuestro programa ‘Dysama Partner’, un programa exclusivo enfocado a constructores y promotores inmobiliarios", detalla Máñez. 

Pandemia, aniversario y futuro

La empresa ha crecido exponencialmente durante los últimos tres años. El sector ha sufrido la escasez de recursos de personal cualificado. Además, la pandemia por la Covid-19 fue “surrealista”. El CEO recuerda que “desde el primer estado de alarma en marzo de 2020 cerramos todas las tiendas, hicimos un ERTE y en los siguientes seis meses ya habíamos recuperado al 100% de la plantilla. Tengo que reconocer que el equipo se volcó al 200% con la causa. El problema vino después, con la escasez de material y los incrementos de la materia prima, ahí sí que sufrimos las consecuencias al igual que el resto del sector”.

La celebración del 30º aniversario de la firma ha servido para hacer una remodelación de las tiendas. Entre otros productos, los orígenes parten del azulejo, “del taulell de toda la vida”, pero con una evolución, hacia una cerámica versátil. Máñez afirma que “hemos representado espacios dentro de nuestras tiendas fuera del ámbito de los baños y las cocinas convencionales, tenemos que romper el esquema, hacer cosas diferentes, aportar valor diferenciador al sector. El cliente necesita ver la realidad de su proyecto, no imaginar el resultado final”. En este sentido, han recreado tiendas de ropa, terrazas, tiendas de motocicletas, el hall de un hotel y una serie de espacios únicos. Dysama también ha abierto una nueva línea de negocio basada en la instalación de cocinas en promociones de obra, un nuevo equipo técnico dedicado únicamente al desarrollo de departamento técnico y de instalación 

La empresa celebró este jueves tres décadas de trayectoria con la participación de la gerente de la Galería CLC Arte de Valencia, Carla Alabau, quien trasladó alguna de sus esculturas a la tienda principal de Dysama de la capital del Turia consiguiendo una fusión de arte y diseño con la presencia de clientes, proveedores, arquitectos, decoradores e interioristas del sector.