Las elecciones del pasado domingo en el País Vasco dejaron unos resultados que no suponen un cambio de color político en el gobierno de la comunidad autónoma. El Partido Nacionalista Vasco obtuvo 31 escaños, tres más que en los pasados comicios y EH Bildu 22 escaños. Sin embargo, la polémica ha surgido porque dentro de los diputados de la llamada izquierda abertzale hay tres integrantes que son expresos de la banda terrorista ETA.

Arkaitz Rodríguez, Iker Casanova e Ikoitz Arrese han cumplido casi 20 años de cárcel entre los tres, por pertenencia a banda armada, como recordó El Español. El segundo ya ha formado parte del Parlamento Vasco. Ocupó su escaño en 2014 y permaneció hasta junio de 2020. Por lo tanto, si conserva su acta de diputado y la nueva legislatura dura cuatro años, acumulará una década cobrando sueldos públicos en política.

La asignación que consta en el Portal de Transparencia del Parlamento Vasco para los diputados en el presente ejercicio es de 14 pagas anuales de 5.380 euros brutos*. En los meses de junio y julio, con una la extra de verano y Navidad, los ingresos se doblan: 10.760 euros. Son 75.320 euros anuales. Esta cantidad supera la estipulada para los ministros del Gobierno de España. Este año cobrarán 74.858 euros en 12 pagas de 6.238 euros. Recuerda que cada cámara legislativa autonómica tiene potestad para fijar las retribuciones de sus señorías. Si hacemos memoria, en 2017, el salario de los parlamentarios vascos era de 4.996 euros mensuales. Ahora es un 7,6% más elevado.

Rueda de prensa de la banda ETA.

Por su parte, la actual presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria Otermin, percibe 7.441 euros al mes; los vicepresidentes y secretarios y los portavoces de los grupos parlamentarios, 6.333 euros mensuales. Todos estos salarios son como el de los parlamentarios, es decir, brutos y en 14 pagas.

Además, la página web señala que los parlamentarios que tuvieran a partir de diciembre de 2003 una relación jurídica de servicio con las administraciones públicas, pueden solicitar el abono de la antigüedad, reconocida pos su administración de origen.

Arkaitz Rodríguez

Nació en 1979 en San Sebastián. Es el actual líder de Sortu, organización heredera de Batasuna y que lucha para “impulsar la liberación nacional y social de Euskal Herria”, según afirman es su página web. Rodríguez compartió la etapa en prisión con Arnaldo Otegi, del que ya publicamos su sueldo en 2018 en exclusiva. En 2015 salió de prisión y dos años después fue elegido secretario general de Sortu. 

Iker Casanova

Nació en 1972 en Baracaldo. En 2002 fue condenado a 11 años de prisión por pertenencia a una banda armada. Ingresó en prisión, donde estuvo con otros miembros de ETA. Salió en 2011 y tres años después entró en el Parlamento Vasco para sustituir a Laura Mintegi. Según las asignaciones publicadas en el mismo portal, el vasco podría haber percibido unos 450.000 euros desde que es diputado. En su declaración de actividades de 2016 no presenta ninguna ocupación.

Arkaitz Rodríguez, Iker Casanova e Ikoitz Arrese (El Español).

Ikoitz Arrese

Nació en Baracaldo en 1987. Perteneció a la asociación conocida como Segi, ilegalizada por el Tribunal Supremo por su vínculo con ETA. Permaneció en prisión un año y medio.

En las próximas semanas, está previsto que los nuevos 75 diputados, algunos repiten, recojan su acta y presenten su declaración de bienes y rentas que estará disponible en la página web del Parlamento. Por otra parte, los diputados tendrán derecho a asistir a las sesiones del Pleno del Parlamento y a las de las comisiones que formen parte. También podrán recabar de las administraciones y empresas públicas del País Vasco datos, informes y documentación. Además de la asignación económica, tienen derecho a ayudas franquicias e indemnizaciones “por gastos que sean indispensables para el cumplimiento de su función”. También tendrán inviolabilidad por las opiniones, actuaciones y votos emitidos en el ejercicio de su cargo.

En cuanto a sus deberes como parlamentarios, el reglamento incluye el de asistencia a los plenos y las comisiones de las que formen parte, pudiendo ser cancelada la percepción económica en caso de la no asistencia continuada; deben respetar el orden, la cortesía y disciplina parlamentaria y no utilizar su condición con fines ajenos; deben presentar la declaración de actividades que puede constituir incompatibilidad y la declaración de bienes. 

Por último, los presupuestos de 2020 reflejan unos ingresos de 34,8 millones de euros. Más de la mitad son para remuneraciones del personal, unos 19,1 millones. 

*Los diputados de EH Bildu donan un porcentaje de su sueldo al partido.

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