2012: Cuando Posada se plantó y decidió no reponer una veintena de tabletas que habían perdido los diputados
Sus señorías cuentan con un teléfono móvil entregado por la Cámara Baja, excepto los cuatro diputados presos por el procés
El pasado martes, 24 de septiembre, se hacía oficial la disolución de las Cortes Generales. Después de varios meses de negociaciones, la investidura de Pedro Sánchez resultaba fallida al no poder ponerse de acuerdo con ninguno de los partidos y, por consiguiente, no poder formar gobierno. Este hecho, además de aumentar todavía más la inestabilidad política en la que se encuentra España, ha causado cierto revuelo en la situación de los diputados que entraron con la XIII Legislatura y que, según los resultados de las próximas elecciones del 10 de noviembre, repetirán o no.
La Mesa, que preside Meritxell Batet, se reunió un día antes de dicha disolución para tomar diversas decisiones en relación con la situación de los diputados. Estas fueron fijadas en un documento al que Efe tuvo acceso y donde figura qué pasará con los diputados hasta el día de la constitución de la próxima legislatura, como por ejemplo la famosa indemnización de transición.
Los diputados, una vez entran a trabajar en el Congreso, reciben cada uno una tableta y un móvil de trabajo. Entonces, ahora que ha fracasado la legislatura más corta de la historia de España y llevan tan solo cuatro meses calentando un escaño con escasa o nula actividad, ¿qué pasa con esos dispositivos?
Los móviles
En dicho documento, aparecen las decisiones tomadas en cuanto a la regulación de los dispositivos tecnológicos entregados a los diputados al inicio de la legislatura. De esta manera, los diputados que tengan que abandonar sus puestos de trabajo si cambia el gobierno, tendrán dos opciones: bien devolver las tabletas o bien comprarlas por, aproximadamente 118 euros. Lo mismo pasa con los teléfonos móviles, modelo Iphone, por los que tendrán que pagar un total de 607 euros si deciden quedárselo.
Posada, en la tribuna del hemiciclo del Congreso (GP. Popular).
Todos los diputados cuentan con un teléfono móvil entregado por la Cámara Baja, excepto los cuatro diputados presos por el procés. Puesto que todavía hay cierta incertidumbre en cuanto a los posibles resultados en las urnas, pueden alargar la decisión hasta que se sepa si continúan con su escaño o no.
Según El Español, en la anterior legislatura el Congreso llegó a recaudar aproximadamente 110.000 euros por la venta de los dispositivos a sus “dueños”. El Iphone 6 por 125 euros, el Iphone 7 por 300 y el Iphone 8 por 717,89 euros.
Las tabletas
A principios de julio, el Congreso aprobó la compra de 400 unidades de la tableta iPad para los diputados por un total de 504.673 euros, todo esto durante las negociaciones que mantuvieron PSOE y Unidas Podemos para una posible formación de gobierno progresista.
Las tabletas son último modelo Apple, con una pantalla de 11 pulgadas, grabación en 4K, cámara de 12 megapíxeles y un disco duro de 256GB, características que coinciden a la perfección con el iPadPro, que en tienda cuesta un total de 1.099 euros. Según los pliegos técnicos, la Cámara Baja en ningún momento exigió que tuviesen que ser el último modelo, sin embargo, dictó una serie de características que encajaban a la perfección con el modelo.
No obstante, las tabletas llegaron más tarde de lo previsto, debido a la situación en la que se encontraba el Gobierno en funciones, por lo que la Mesa licitó la entrega de los dispositivos para después de la constitución del nuevo Congreso que determinen las nuevas elecciones, con lo cual los diputados no han recibido ningún tipo de tableta durante estos meses desde la investidurar, por lo que la decisión de comprar los dispositivos solo está centrada en los móviles.
En la X Legislatura, la de 2011-2015, el 95% de los diputados elegidos, 332 de sus señorías, se quedaron el iPad del Congreso pagando solo 50 euros. Lo autorizó la Mesa del Congreso, pese a que el valor de compra de las tabletas rondó los 300 euros hace ocho años. En total, la Cámara Baja recaudó 16.660 euros por este concepto, según publicó Europa Press en junio de 2016. Además, el 74% de los diputados de la X legislatura renunció a la línea ADSL en sus domicilios. Eso sí, los diputados elegidos en las elecciones del 20 de diciembre de 2015 tuvieron que pagar 700 euros si querían quedarse con su ‘kit tecnológico’.
Además, en noviembre de 2012, el Congreso, bajo la presidencia del ‘popular’ Jesús Posada, decidió no reponer, al menos, una veintena de portátiles tipo iPad, que habían ‘perdido’ los parlamentarios. Así, los servicios técnicos solo estaban dispuestos a reparar una decena de las tabletas dañadas o que no funcionaban. Argumentaban, en plena crisis económica “austeridad” y “responsabilidad” para tomar esta decisión. Según informó EFE en su momento, Posada calificó la cifra de entre 15 y 20 como “un poquito demasiado alta”. El presidente explicó que se enviaría una carta a los diputados advirtiéndoles de que si se producía una segunda avería esta correría a cargo del diputado.
Por su parte, el entonces diputado del PP, Santiago Cervera, señaló en un artículo de su propio blog que el Congreso almacenó 50 aparatos en la reserva, de los que 20 eran para los servicios técnicos y 30 para sustituciones o robos. Admitió que se habían perdido unos 30 con apenas un año de legislatura pero lo justificó porque los diputados viajan mucho. Además, reconoció que algunos se habían recuperado en oficinas de objetos perdidos de aeropuertos y estaciones y se mostraba seguro de que la Cámara no tenía constancia de usos indebidos o no autorizados de dispositivos sustraídos.
Una parte de la opinión pública se alarmó al considerar que esas ‘pérdidas’ no eran más que un eufemismo para no reconocer que el dispositivo electrónico lo manejaban los hijos de los diputados.