Gastar para dejar constancia, pero no ejercer el voto. Invertir para otros que no creen en la institución. ¿Derrochar o gestionar el dinero público para salvaguardar un derecho? Yo, mi, no entender, afirman otros.

El Senado va a invertir 5.000 euros en modificar los aparatos de votación del Pleno a petición de Amaiur, que solicitó una adaptación de estas máquinas para poder dejar constancia de que sus senadores están presentes en los Plenos, pero que no participan en las votaciones.

La Junta de Portavoces recibió el mes pasado la petición de los senadores vascos y ha decidido adaptar los sistemas electrónicos de votación para reflejar esta novedad. El interés de los miembros de Amaiur, inscritos en el Grupo Mixto, es reflejar su presencia en las sesiones plenarias, aunque luego no ejerzan su derecho al voto.

"Manifestar que pudiendo votar no lo hacen", explicaron fuentes parlamentarias cuando llegó la solicitud, que fue aceptada por la Junta de Portavoces y la Mesa del Senado y trasladada a la  Secretaría General de la institución.

Así las cosas, los aparatos de votación serán adaptados a esta novedad y estarán listos dentro de tres o cuatro semanas, es decir, en abril, según fuentes parlamentarias. La reforma acarreará un coste de unos 5.000 euros.